El mercado de los ETFs está viviendo su momento de oro. Y una de las causas justamente es esa: los fondos cotizados que invierten en oro.
En 2008, el oro en posesiòn de los ETF que se encuentran respaldados por el metal alcanzó un total de 1.190 toneladas en su conjunto. Esta cifra, para darse una idea, es más oro que el que posee la Schweizerische Nationalbank, Banco Central de Suiza, quinto poseedor oficial de oro en el mundo.
El auge de los ETFs de oro responde a la necesidad de buscar refugio en el oro frente a las crecientes incertidumbres de las economías mundiales. Esto es por lo menos lo que dice un informe publicado por el World Gold Council (Consejo Mundial del Oro).
Con los mercados de capitales en Knock Out, los bonos corporativos bajo sospechas de bancarrotas y la renta fija gubernamental con magros rendimientos, los inversionistas se volcaron al oro, cuyos precios alcanzaron el record histórico medido en euros.